Yaquella noche soñó doña Berta que de un pueblo remoto, allá en los puertos de su tierra, donde había muerto el pintor amigo, llegaba como por encanto, con las alas del viento,
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Lasoberna emérita acostumbra a lucir el trío (broche y zarcillos) en ceremonias de diario. Doña Letizia, como informó el propio orfebre también posee varios diseños de su firma, “tiene un
DoñaBerta, conoció que por fin el desconocido la saludaba, y, sin oírle, contestó inclinando la cabeza. Ella no tenía miedo, ¿por qué? Pero estaba pasmada y un pocoCapítulo1. Hay un lugar en el Norte de España adonde no llegaron nunca ni los romanos ni los moros; y si doña Berta de Rondaliego, propietaria de este escondite verde y silencioso, supiera algo más de historia, juraría que jamás Agripa, ni Augusto, ni Muza, ni Tarick habían puesto la osada planta sobre el suelo, mullido siempre con tupida hierba fresca,
Elcapitán se dejó vencer; permaneció en Posadorio más tiempo del que debiera; y un día, cuando las fuerzas de su cuerpo y la fuerza de su amor habían llegado a un grado de intensidad que producía en él una armonía deliciosa y de mucho peligro, cayó, sin poder remediarlo, a los pies de Berta, en cuanto la ocasión de verla sola vino a tentarle.Hayun lugar en el Norte de España adonde no llegaron nunca ni los romanos ni los moros; y si doña Berta de Rondaliego, propietaria de este escondite verde y silencioso, supiera algo más de historia, juraría que jamás Agripa, ni Augusto, ni Muza, ni Tarick habían puesto la osada planta sobre el suelo, mullido siempre con tupida hierba fresca, jugosa, Hemosolvidado aquello de «Cada oveja con su pareja», y hemos cambiado los frenos, como dicen en mi tierra. Hagámonos perdonar nuestra locura, con una gran cordura, volviendo sobre nuestros pasos. Si ellos se casan allá entre sí, casémonos nosotros acá in ternos. DOÑA BERNARDA. — ¡Oh!, en cuanto a eso Laspalabras del pintor adquieren más sentido cuando el detalle del retrato se satura en un punto sucesivo de la narración: transcurridos ocho días -marcados por el debate interior